Las ciudades son tu centro de juego en Kingdoms of Camelot. En ellas construyes tus edificios. En el campo adjunto produces recursos. En sus cuarteles entrenas tropas y en sus muros construyes defensas. Desde ellas, mediante el mapa, ordenas transportes y ataques.
Al crear una ciudad hay que asignarle un nombre. Ese nombre puede ser cambiado posteriormente obteniendo el permiso mediante su compra con gemas o ganándolo en el sorteo de Merlín.
Cuando tienes varias ciudades puedes abandonar una. Con ello se perderá todo lo que ella contenga. Podrás volver a construir otra en otra ubicación. No es posible abandonar todas las ciudades de un dominio; siempre quedará al menos una.
Protección de ciudad. La primera ciudad está inicialmente protegida de dos formas: mediante la protección de principiante, que impide que te ataquen durante cuatro días, y por la Niebla de Avalón que hace que sus datos sean invisibles durante una semana. Esas protecciones se pierden si en ese tiempo atacas otra ciudad. La Niebla de Avalón puede también comprarse (10 gemas) y usarse en cualquier momento del juego. También es posible adquirir con gemas otras protecciones temporales de la ciudad y la posibilidad de modificar su ubicación o su nombre.
Al iniciar el juego Kingdoms of Camelot en un dominio se te concede tu primera ciudad. en una ubicación al azar.
Para la segunda ciudad es necesario:
Conseguir la "Escritura de Segunda Ciudad" comprándola en la tienda con gemas o alcanzando el grado de barón, es decir, el nivel 7.
Conquistar una llanura virgen.
Reforzar esa llanura con 250 Tropas de Suministro que lleven 10.000 unidades de cada uno de los recursos: oro, alimentos, madera, piedra y mineral.
Tener al menos 10 amigos de Facebook jugando Kingdoms of Camelot.
Para la tercera ciudad es necesario:
Obtener la escritura de tercera ciudad para lo que es necesario haber ganado 4 blasones de Sir Bor, 3 blasones de Sir Ector y 1 blasón de Sir Kay. Estos blasones se consiguen comprándolos con gemas o conquistando tierras vírgenes de nivel 5, 6 y 7. Ver aquí cómo conseguir los blasones.
Conquistar una llanura virgen.
Reforzar esa llanura con 250 Tropas de Suministro que lleven 10.000 unidades de cada uno de los recursos: oro, alimentos, madera, piedra y mineral.
Para la cuarta ciudad es necesario:
Obtener la escritura de tercera ciudad para lo que es necesario haber ganado 4 blasones de Sir Kay, 3 blasones de Sir Bedivere y 1 blasón de Sir Gawain. Estos blasones se consiguen comprándolos con gemas o conquistando tierras vírgenes de nivel 8 y 9. Ver aquí cómo conseguir los blasones.
Conquistar una llanura virgen.
Reforzar esa llanura con 250 Tropas de Suministro que lleven 10.000 unidades de cada uno de los recursos: oro, alimentos, madera, piedra y mineral.
Al crear una ciudad hay que asignarle un nombre. Ese nombre puede ser cambiado posteriormente obteniendo el permiso mediante su compra con gemas o ganándolo en el sorteo de Merlín.
Cuando tienes varias ciudades puedes abandonar una. Con ello se perderá todo lo que ella contenga. Podrás volver a construir otra en otra ubicación. No es posible abandonar todas las ciudades de un dominio; siempre quedará al menos una.
Protección de ciudad. La primera ciudad está inicialmente protegida de dos formas: mediante la protección de principiante, que impide que te ataquen durante cuatro días, y por la Niebla de Avalón que hace que sus datos sean invisibles durante una semana. Esas protecciones se pierden si en ese tiempo atacas otra ciudad. La Niebla de Avalón puede también comprarse (10 gemas) y usarse en cualquier momento del juego. También es posible adquirir con gemas otras protecciones temporales de la ciudad y la posibilidad de modificar su ubicación o su nombre.
Al iniciar el juego Kingdoms of Camelot en un dominio se te concede tu primera ciudad. en una ubicación al azar.
Para la segunda ciudad es necesario:
Conseguir la "Escritura de Segunda Ciudad" comprándola en la tienda con gemas o alcanzando el grado de barón, es decir, el nivel 7.
Conquistar una llanura virgen.
Reforzar esa llanura con 250 Tropas de Suministro que lleven 10.000 unidades de cada uno de los recursos: oro, alimentos, madera, piedra y mineral.
Tener al menos 10 amigos de Facebook jugando Kingdoms of Camelot.
Para la tercera ciudad es necesario:
Obtener la escritura de tercera ciudad para lo que es necesario haber ganado 4 blasones de Sir Bor, 3 blasones de Sir Ector y 1 blasón de Sir Kay. Estos blasones se consiguen comprándolos con gemas o conquistando tierras vírgenes de nivel 5, 6 y 7. Ver aquí cómo conseguir los blasones.
Conquistar una llanura virgen.
Reforzar esa llanura con 250 Tropas de Suministro que lleven 10.000 unidades de cada uno de los recursos: oro, alimentos, madera, piedra y mineral.
Para la cuarta ciudad es necesario:
Obtener la escritura de tercera ciudad para lo que es necesario haber ganado 4 blasones de Sir Kay, 3 blasones de Sir Bedivere y 1 blasón de Sir Gawain. Estos blasones se consiguen comprándolos con gemas o conquistando tierras vírgenes de nivel 8 y 9. Ver aquí cómo conseguir los blasones.
Conquistar una llanura virgen.
Reforzar esa llanura con 250 Tropas de Suministro que lleven 10.000 unidades de cada uno de los recursos: oro, alimentos, madera, piedra y mineral.
¿Dónde construir las ciudades? Las ciudades secundarias construyen sobre la llanura que hayas elegido. Se plantea por tanto un dilema.
Si la construyes muy cerca de tu primera ciudad, los transportes entre ellas serán fáciles y rápidos.
Si la construyes alejadas de tu primera ciudad tendrás acceso rápido a otras tierras vírgenes o a otras ciudades. Quizá quieras construir una ciudad cercana a la ciudad de un amigo, un aliado... o incluso ¡a la de un enemigo al que quieras atacar frecuentemente!.
Si la construyes muy cerca de tu primera ciudad, los transportes entre ellas serán fáciles y rápidos.
Si la construyes alejadas de tu primera ciudad tendrás acceso rápido a otras tierras vírgenes o a otras ciudades. Quizá quieras construir una ciudad cercana a la ciudad de un amigo, un aliado... o incluso ¡a la de un enemigo al que quieras atacar frecuentemente!.
